• Colombia
  • Última actualización 2024-03-27 23:33:12

Villavicencio, foco de inversión para vivienda

La capital del Meta fue una de las ciudades donde más creció el mercado de vivienda nueva en 2014, con una inversión de los hogares que ascendió a $502.277 millones.

La actividad edificadora en la región, particularmente en Villavicencio, ha dinamizado la economía, tanto así que en enero de 2015 el número de ocupados en el sector de la construcción, según el DANE, sumó 20.582 personas, representando el 9,8 % del empleo total en la ciudad, muy por encima del promedio nacional que fue de 7 %.

De acuerdo a las cifras del sistema Georreferenciado de Camacol - Coordenada Urbana, el mercado de vivienda nueva en la ciudad cerró el 2014 con una inversión de los hogares por $502.277 millones. De igual manera, las estadísticas de licenciamiento en la ciudad muestran un crecimiento de 18 % en el número de unidades de vivienda, mientras que las licencias para el comercio se multiplicaron por seis, pasando de 20.000 metros cuadrados a más de 138.000 en el último año terminado en enero de 2015.

Por otro lado, los despachos de cemento en el departamento también mostraron un desempeño positivo, con una variación de 8,5% en los últimos doce meses a enero de 2015, alcanzando así un volumen de 418.262 toneladas.

Así lo expuso la presidente de Camacol, Sandra Forero Ramírez, en el marco de la Segunda Asamblea Regional de Afiliados Camacol Meta, quien destacó además el potencial de demanda que existe en la región para el nuevo programa de vivienda del gobierno “Mi Casa Ya”.

“En Villavicencio hay 28.501 hogares que no poseen vivienda propia y que, además, tienen ingresos entre dos y cuatro salarios mínimos mensuales. Además, hay 39.572 hogares que ganan menos de dos salarios mínimos, que serían potenciales demandantes de Vivienda de Interés Prioritario o Vivienda para Ahorradores (VIPA)”, explicó la Ejecutiva de Camacol.

“Los programas de vivienda social hacen que este segmento sea una gran oportunidad para los próximos años. En la oferta, se debe tener claro que se requiere el suelo urbanizable para materializar los proyectos, sumado a la generación de un entorno de estabilidad jurídica que cubra integralmente al sector, con acciones que van desde disposiciones ambientales hasta la prestación eficiente de servicios públicos de agua potable y saneamiento”, concluye Sandra Forero Ramírez.

Compartir esta publicación